Close

Mis escenas favoritas de Star Wars

En un ejercico subjetivo -¿qué no todos lo son?-, elijo las que para mí son las mejores escenas de la saga de Star Wars. Nota: para mí Star Wars es la obra de un autor, y ese autor se llama George Lucas, así que solo se incluyen las 6 películas de su saga original.

Antes de empezar, les comparto que he decidido enlistar los episodios tal y como fueron estrenados en cines; ésto porque cada peso de las escenas que les presentaré, tiene mayor sentido cuando se les analiza tal y como fueron presentadas al público en su momento.

 

Ahora sí, ¡comenzamos!

Star Wars: Episode IV – A New Hope (1977)

Luke acepta su destino

 

La primera película de la saga está plagada de momentos memorables. Es, para empezar, la cinta que nos va introduciendo a los personajes que nos acompañarán en los próximos años. Sí, quizá en esta película el momento resulta obvio…

 

Después de reportarle a su tío el estado de los dos droides recientemente adquiridos, el joven Luke Skywalker le anticipa a él su anhelo por “ahora sí” poderse ir a la academia imperial y convertirse en un piloto como siempre lo ha deseado.

 

Luke, fastidiado de la vida tranquila de “un simple” granjero, anhela algo más allá que el arenoso suelo de su planeta Tatooine. Owen Lars, a cargo del muchacho, le pide un año más para seguir con su ayuda, y entonces él, “ahora sí”, dejarlo ir con su sueño.

 

Luke luce decepcionado, por lo que frente a un imponente atardecer de dos soles, observa que hay un futuro que se le va de las manos si sigue sujetándose a las cadenas de su realidad. Es, en ese momento, que acepta su verdadero destino… Sí, destino que no lo amarra a su granja en Tatooine.

 

Para empezar: la música. John Williams nos regaló con el posteriormente conocido como “tema de la Fuerza”, una de las melodías más poderosas de toda su carrera. Es la Fuerza la que llama a Luke a cumplir con su destino, mientras que la posterior escapatoria de R2-D2 de su casa termina siendo nada mas y nada menos que el primer paso en su realización.

 

Mark Hamill, sin ser un actor de grandes cualidades, nos ofrece una de sus mejores interpretaciones con una mirada y gesto que reafirman esa esperanza; pero también ese anhelo y aceptación por lo que viene de parte de su personaje.

 

Qué les digo, es, posiblemente también, la mejor escena de toda la saga…

Star Wars: Episode V – The Empire Strikes Back (1980)

Darth Vader le confiesa a Luke la verdad

 

Tras el éxito de Star Wars (1977), George Lucas acepta el llamado no precisamente del atardecer de Tatooine, sino del dinero, y también de la posibilidad de seguir contando una historia que había pensado más amplia.

 

Sí, The Empire Strikes Back introduce nuevos elementos que inclusive tampoco habían estado presentes en el inicio, pero que terminan por ampliar una historia que Lucas ya había pensado terminar entonces en tres partes. La inclusión de esta escena, quizá la más obvia como selección de “la mejor escena de The Empire Strikes Back”, resulta fundamental para entender toda la saga.

 

Tras decidirse a enfrentar a Darth Vader, a la mitad de su entrenamiento con el maestro Jedi Yoda, Luke Skywalker cae abatido por su más poderoso oponente para finalmente refugiarse en un espacio donde o se dejará matar por su espada láser, o se dejará caer sin rumbo fijo en el abismo de la ciudad en los cielos, Bespin.

 

“Obi-Wan nunca te dijo lo que le pasó a tu padre”, le lanza Darth Vader a un Luke al que le pide unírsele. “Me dijo suficiente, me dijo que tú lo mataste”, le contesta Luke. “No, yo soy tu padre”.

 

La escena sigue emocionando, aun y cuando todo el mundo sabe que Darth Vader es el padre de Luke; porque sí, un spoiler no echa a perder una película que no depende únicamente de ese factor sorpresivo.

 

La música, con el tema de Darth Vader de fondo -la “Marcha Imperial”, quizá el mejor tema musical de toda la saga-, no hace mas que aumentar el dramatismo.

 

Vader, sin tener ni una sola gesticulación, con su imponente presencia y la poderosa voz de James Earl Jones, se roba definitivamente la escena; sin embargo, la sorpresa de un Luke al que no pudo haberle caído peor la noticia, es otro gran mérito de Mark Hamill.

 

Por cierto, este elemento emocional hace de este duelo de espadas láser, si no el mejor, sí por lo menos uno de los dos mejores en la historia de la franquicia.

Star Wars: Episode VI – Return of the Jedi (1983)

Darth Vader muere

 

El duelo entre Darth Vader y Luke Skywalker en Return of the Jedi es mi favorito, sin duda alguna; y es que como el anterior ya descrito, éste contiene un efecto emotivo invaluable que le llena de momentos muy impactantes, y desde luego muy adecuados para el fin de la que se suponía entonces era la saga completa de Star Wars.

 

Con Return of the Jedi George Lucas cerraba así el viaje del héroe de Luke, con un triunfo final que le haría culminar ese trayecto que comenzó con el atardecer de dos soles en Tatooine.

Luke ayudaba a que su padre se redimiera dando muerte al principal villano, el Emperador Palpatine. Tras el acto heroíco, Vader cae fulminado por la fuerza del Emperador, para entonces yacer así a los brazos de su hijo.


En medio de la destrucción de la segunda Estrella de la Muerte, con el triunfo casi sellado por sus amigos rebeldes, Luke carga solo con su padre mientras los imperiales corren para salvarse. Las dos figuras solitarias se encuentran a los pies de la nave que regresará a Luke a la luna de Endor; sin embargo Vader ya no puede, por lo que con sus últimas fuerzas le pide a su hijo que le quite la máscara.

Vader ha dejado de ser el malvado villano de la saga, y ahora, reconvertido una vez más en Anakin, pide a su hijo el gusto de verlo por primera vez con sus propios ojos. “Pero morirás”, le replica Luke. “Nada… puede detener eso ahora. Solo por una vez… déjame… verte con mis propios ojos”, le pide Anakin.

Después, tras pedirle que se salve y que le deje ahí, Luke le repite que no hará pues debe salvarlo. “Ya lo has hecho, Luke. Tenías razón. Tenías razón sobre mí. Dile a tu hermana… que tenías razón”.


Sí, para muchos The Return of the Jedi es no solo una de las películas más flojas de la trilogía original, sino también de la saga. Sin embargo, es justamente el final el que la sostiene definitivamente. Esta escena, en específico, vale todo el esfuerzo; sí, justo como la siguiente escena del siguiente episodio…

Star Wars: Episode I – The Phantom Menace (1999)

Anakin se despide de su mamá

 

Hablar bien de The Phantom Menace es casi suicidio. Para muchos no hay nada de rescatable en un episodio en el que por cierto, en el llamado “orden machete” para ver las películas, se prescinde de ella. “Me cae que solo la veo por Darth Maul“, afirman muchos. Y sí, no los culpo, yo pensaba lo mismo.

 

La película tiene muchas carencias que terminan por hacerla una película un tanto desigual; sin embargo, en la siguiente escena que considero la mejor de la misma, es donde uno entiende muchas de las decisiones artísticas de su realizador. Sí, con la siguiente escena George Lucas justifica uno de los elementos más odiados por los fans: el Anakin Skywalker niño de aspecto muy infantil.

 

The Phantom Menace era el regreso de Star Wars después de 16 años de ausencia. Muchos, en esos años de carencia de la saga, imaginamos por nuestra cuenta la historia del pasado que llevaría finalmente a Anakin Skywalker a convertirse en el temido Darth Vader. Por eso, cuando vimos a un Anakin que le preguntaba a su futura esposa Padmé si ésta era un ángel, muchos lanzamos un grito enorme a los cielos.

 

Es, sin embargo, que George Lucas construyó todo alrededor de un elemento fundamental: Anakin debía separarse de su madre, figura central en su camino al lado oscuro; y al separarse de ella la escena donde esto sucedía debía conmovernos, pues tendríamos empatía en el joven Anakin que dejaría todo, inclusive a su propia madre tras un arrebato de nada mas y nada menos que los Jedi. La escena, por sí misma, funciona definitivamente.

 

Ah, por cierto, ¿ubican el que es el mejor póster de la saga de Star Wars? Pues ese póster es síntesis precisamente de esta escena, ¿no lo creen?

Star Wars: Episode II – Attack of the Clones (2002)

Anakin venga la muerte de su madre

 

Sí, increíble, pero Attack of the Clones es para muchos todavía peor que The Phantom Menace, aunque por más orden machete que exista, es indudable que sin ella no podría entenderse parte de la historia completa que Lucas nos contaba ahora a partir de las precuelas: la historia de Darth Vader.

 

Attack of the Clones tiene muchas, pero muchas escenas para el franco olvido, pero también tiene una de las mejores escenas de la saga; escena, que por cierto, resulta fundamental para entender a Darth Vader pues sería aquí donde éste daría sus primeros pasos.

 

Anakin sigue los pasos de su madre, misma a la que siente en peligro y por la que rompe su obligación como Jedi para acudir a sus rescate. En el viaje es acompañado por Padmé, a quien había sido asignado para proteger.

A su regreso a Tatooine, Anakin se entera que su madre ha sido raptada por un grupo de hombres de las arenas que nadie se atreve a enfrentar; bueno, nadie salvo el propio Anakin.

Ya, en la aldea, Anakin encuentra a su madre quien fallece en sus brazos. Enfurecido, el todavía Jedi, acaba con la aldea completa… incluyendo con los niños.

Star Wars: Episode III – Revenge of the Sith (2005)

Anakin y Padmé se despiden… para siempre

 

Prometo pronto un análisis a fondo de Revenge of the Sith, una de las mejores películas de la saga, a pesar de estar aparentemente en el olvido por la mala fama que las precuelas fueron ganando.

 

Con Revenge of the Sith George Lucas consigue no solo cerrar el círculo abierto con las precuelas, sino también redondear mejor la historia de las 6 películas en las que directamente influyó. Además, la trilogía de las precuelas sería la única que George Lucas dirigiría de manera completa, por lo que además se convierte en definitiva en su obra más personal. Con esta película George Lucas marcaría el fracaso de los Jedi con el episodio más trágico de toda la saga; sí, trágico, aunque al final se asome ahí “una nueva esperanza”… Poético sin duda.

 

Tras advertir que el Supremo Canciller Palpatine es un Sith, el joven Jedi Anakin Skywalker alerta al maestro Mace Windu para que tome cartas en el asunto. Es el propio Windu quien decide acudir a enfrentar al Supremo Canciller, ordenándole a Anakin que en definitiva abandone el Templo Jedi y que no acude pues siente aun mucha confusión en él.

 

Una de las grandes críticas a Hayden Christensen es su actuación, de la que no lo culpo absolutamente a él, sino también a George Lucas. Lo peor de la actuación de Christensen son sin duda sus diálogos, mismos que en esta escena no aparecen.

 

Christensen ofrece su mejor actuación en un momento donde además se conjuga la música de John Williams, quizá una de sus composiciones más oscuras para la saga, sino es que la más.

Padmé en su departamento y Anakin en el sitio del Consejo Jedi, se comunican sin diálogo, en sitios distintos, pero se comunican y se conectan. Es, sin dejarlo tan evidente, un franco diálogo, una despedida. Anakin Skywalker se despide de su amada, para siempre… Ha decidido Anakin convertirse en Darth Vader, no hay vuelta atrás.

En fin, hasta acá este recuento de las que considero son las mejores escenas de las películas de la saga de Star Wars. Sí, con distintos enfoques seguro encontramos algunas otras, aunque considero sin más que éstas son mis elegidas.

 

¿Ustedes tienen otras? ¿Me las comparten, me dicen por qué?

svg18 min read

Enrique Figueroa Anaya

Profesional en la difusión de arte, cultura e historia, con especialización en cine y música. Soy titular de los pódcast CinemaNET, ¡Clack! Un podcast de Le Cinéma IFAL, "Luces, cámara, ¡niñxs!, "Cinema Tempo – Historia y Enrique Figueroa MX. Actualmente soy colaborador de la revista Cine PREMIERE, del pódcast Cinegarage y del noticiario Mesa de prensa de Concepto Radial.

Leave a reply